Cosas y casas

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Por casualidad (o no, ya nada es casual...) me encuentro por 10 euros con la revista Blank, dentro de un papel de celofán (¿se llama todavía así, ello?) Abro y compruebo un estupendo papel donde se ha imprimido todo (Lo digo, sí: Papeles ArjoWiggins, en varios tipos y gramos), pero especialmente en la portada azul cielo, aturquesado, a la derecha una etiqueta pegada con los datos de blank y su bestiario sXXI, del 07, y más o menos centrado un maravilloso lacre rojo atamponado con su anagrama. Lacre auténtico (lanzado a mano, existe alguna máquina??), que me remite a nuestro aürt del 83-84 y aquel número que lacreamos a mano, una por una cada ejemplar, hasta extasiarnos o quemarnos...

Contenidos estupendos con buenos textos y obra gráfica en dibujos, pinturas, fotos y diseño general que la hace extremadamente necesaria para los tiempos que discurren entre mediocridades o ausencias innecesarias, impagables, homicidas del arte neutro, inestable, de caídas de cabeza en los cojines de los cojones...

Atractiva, no por diseño, más bien por posibilidades de alta difusión de lo expuesto, la página del genio y figura: Saatchi. Puede dar un golpe de mano, brazo o espalda a gente que como yo estamos freelanzados (de freelance, supondría...) No sé si agradecerle si me publica quelcom o irme a peregrinar por la Antártida hasta que lo Humano se de cuenta, y los hielos también, que lo estamos destrozando todo... Incluso el arte, podridillo arte de pijama y muy señor mío. Y mientras: Las piscinas llenas de sangre o parece pigmento: Rojo cadmio o carmín intenso. El agua ni se ve ni se bebe... Los artistas aplastados, como es costumbre visceral o antagónica, y sin rencores, sabido es...

Tiene razón y apoyo las palabras de Francesc Joan Barba Corsini, arquitecto tarraconés de noventa y un años de edad, y todavía en activo, ejemplo de coraje, saber y trabajo:

“Hoy me interesa más un pescador que hace una casa que una casa hecha por un arquitecto...” Y acierta de nuevo: “ Hoy en día en urbanismo se dibujan las carreteras y en lo que queda entre ellas, en los restos, es donde vive la gente...” Y acaba en la entrevista que le proponían hace unos dias en El País: “Como proponía hace años Gropius, yo también creo en las personas. Las personas son el centro. No me interesan las ciudades en las que mandan las carreteras.” Yo me atreviría a apostillar: Podriámos creeer en elaborar y difundir (y creer después de crear) un arte para las personas. Pero la mayoría de estas personas no tienen, no se les propone desde tierna y no tan tierna infancia –las escuelas, los hogares, los ayuntamientos...- el acceso al arte y a la cultura en general y por extensión. Priman demasiado oscuros intereses y la ignorancia interesada, supina, conocidad y elaborada desde despachos de poder político y económico. Se pierde más tiempo y dinero (muchísimo dinero) en diseñar por donde perforamos terrenos para meter más carreteras, autopistas y AVE que no para perforar pacíficamente las mentes del futuro cercano, las mentes que cada vez perciben menos educación con sentido común y sentido de la convicencia, por extensión, repito: La cultura. Y así nos va y nos irá... Tontos del culo y de la cónsola.

Epitafios

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Sigo preocupado por el último cuadro que pintó Picasso antes de morir en abril de 1973. Hasta hace poco creía que era un autorretrato de verano del 72 o dos más que realizó aquellos días, donde se mostraba el mismo muy demacrado, en forma y colores, salvo por unos ojos muy grandes y vivos, seguramente como apego y deseo por seguir agarrado a lo que le podía quedar de vida, pues ya superaba los noventa años de edad. Recientemente he sabido que no. Aún siguió pintando hasta el último suspiro, varios meses después, en la misma noche del 7 de abril, vigilia de su muerte el dia 8. Retocó un cuadro titulado por alguien, pues él no titulaba nunca sus obras: "Mujer desnuda acostada y cabeza", que reprodusco aquí:
Como en otras obras suyas él mismo es el observador de la mujer recostada y desnuda, mostrando el último sexo femenino pintado por el autor. Resulta misteriosa la forma arqueada de la derecha. Posiblemente actúa de esbozo de algún espejo o mueble. Por mi parte (muy sui generis, lo reconozco) me ha remitido-sugerido al trineo, principio-final wellsiano de Ciudadano Kane.
Se trata de un cuadro iniciado en mayo de 72 y retocó en su última noche de vida. Hasta el último momento, tanto en este cuadro, como con su producción final siguió rememorando, entre otros personajes solos o acompañados, el tema del pintor y su modelo, donde el sexo seguía presente... En esta última noche según el Tomo II del libro de la Taschen: Picasso (1937-1973) pintó una capa de blanco cremoso, aclarando su tonalidad. Esta información fue facilitada a uno de los autores del libro (I.F.W.) por uno de los organizadores de la exposición "Picasso 1970-1972" en el Palais des Papes en Avignon, exibiéndose las últimas obras de Picasso. Este cuadro fue recibido para la exhibición de mayo, un mes después de su muerte, y la obra aún no estaba del todo seca. Jacqueline confirmó esta información posteriormente.
Lo curioso según mi punto de vista, además de sorpredenrme ahora con este último cuadro retocado y no terminado (él decía siempre que nunca daba por terminada una obra...) es que en el mismo libro el autor que aporta estos datos también escribe: "Hasta ahora no han sido expuestas o publicadas las obras realizadas en 1973". Este hecho lo sigo comprabando ante la imposibilidad de encontrar catálogos o bibliografía sobre esta etapa final que fue más fructífica de lo que se debe suponer. En la mejor web sobre Picasso o en la que existe más información gráfica sobre sus obras en un extenso y detallado catalogo visual de todas (o casi) sus pinturas, apenas nada de los cuatro meses de 1973. Incluso el cuadro citado está catalogado en fecha de mayo del 72. Por todo ello supongo debe existir un archivo o detalle de estas últimas obras., pero seguramente nunca se han hecho públicas por algún extraño motivo. Espero que no sean por su supuesta falta de seguridad en trazos y colores, etiqueta que pusieron en su día a estas últimas obras que realizó el pintor malagueño. En pocos años se resolvió (yo firmo-afirmo donde sea), que estas obras son una maravilla, como un testamento resumen de lo que fue la pintura durante el siglo XX y lo que no hubiera sido sin la aportación de Picasso. También se intuye ahora lo que ha sido, y es, la pintura de muchos artistas (muchos !!) de los últimos veinte-treinta años. Picasso antes y más que nadie se liberaba de tensiones y prejuicios técnicos, todavía y por si no fuera poca su aportación y genialidad en tantos años de combate...
¿Qué extraña razón envuelve el misterio de casi no conocer nadie las obras póstumas de Picasso y especialemnte su última año de vida?¿Fue suficiente conocerlas en la exposición de mayo del 73 y en pocas, o nulas, ediciones posteriores? Creo que no, sería muy necesario y de agradecer que alguien pusiera honor, conocimiento, difusión y reencuentro a esta etapa picassiana.
Sino erro diría que hace varios años, en algún lugar de Europa, se expuso el último cuadro realizado antes de morir por una serie de pintores del siglo XX o incluso más atrás. Ignoro si estaria éste de Picasso, pero seguramente que no, algún misterio entre sus descendientes, coleccionistas o estado francés beneficiario de pagos de impuestos de sus sucesores, deben tener la llave de este (pequeño) misterio. O grande.

Semillas

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He dejado pasar unos días para anotar impresiones sobra la primera Swab. Feria muy interesante, muy importante, muy necesaria, muy valiente, muy de todo, o casi...

Desaría haber participado, pero estoy al margen del mercado normal y del anormal, o sea freelance para consolar conciencia y marginal para consolar la nada...

Siguiendo: Valentía en aportar a Barcelona, y a medio mundo, una muestra “ferial” de arte contemporáneo y del “casi regreso” de la pintura y del dibujo por parte de galerias muy jóvenes e independientes (lo he leído en bastantes sitios pero: ¿independientes de qué o quién?... Misterio). Por otra parte: ¿La pintura y el dibujo se habían ido alguna vez?, o sólo lo parecia o se explicaba interesadamente por los gurús de turno, amigos de los mismo del “no-lugar”...

Sábado tarde, terrible calor, entro con Genís sin pagar, ignorando si había precio y tiket de entrada. Muestras de perfumes que no probe, idem masajes o manicuras o los dos... No ví desde la planta superior las letras del título del certámen ideadas, por entre la disposición de las galeries, por el responsable del diseño de todo en las maravillosas Drassanes. Lugar perfecto salvo por una aparante falta de espacio, todo muy reducido, muy democráticamente repartido eso sí, pero justo, justito para todos... Las sillas-sillones de cartón son buena idea pero yo no me sentaría a gusto o seguro.

Pero lo importante los contenidos: Se aprecia otra vuelta de tuerca sobre las “neuras” de muchos cradores actuales (quizás me incluya aussi, conceptualmente, pero no en todo...) en formas y planteamientos de regreso a la figuración -si es que alguna vez se fue- y especialmente paseos por entre las nubes del comic y del manga en punto y aparte... Aunque existe originalidad nos tropezamos a menudo por espacios abiertos por creadores de la ilustración y diseño gráfico, pero de lleno también a continentes y contenidos de pintura-pintura de Guston, Dokupil, Oehlen joven, Butzer... Se rasca en mundos oníricos, decorativos y sexuales, pero también “lynchianos” para mostar una actividad extraña de animales, muñecos y/o personajes de sueño-pesadilla que remiten al miedo o la muerte presente o sugerida... Poca sociabilidad y política, casi ausencia de crítica, aunque la propia plástica muestra un tipo de desencanto no revolucionario pero algo efectivo para remover alguna conciencia, mediando a una abstracción conceptual a través de la figuración más formal, pero lasciva, inimaginable hace pocos años...

Me gustaron varios (bastantes) de los artistas. Uno especialmente, pero ignoro aún hoy su nombre, que lo estoy buscando, vamos, pues no existe una relación en la web de Swab de los participantes y sus obra; Si las galerias pero es lento, pesado y lástima... ¿Existía-existe catálogo general de todo el evento?, supondría que sí pero me acerqué poco-nada a los lugares privados y menos a los oficiales... Y mira que llevaba un buen montón de postales-reclamo de my web. Pues misterio: Mirando uno de sus cuadros, con dos personajes deformados, casi al instante los observo parecidos en vivo, en los propios pasillos del certamen. Extraña situación, paradoja, casualidad, fascinación, miedo o premonición conocida... Debe ser el precio a pagar por todo lo que conceptúa ahora y para todos los que se cuelan, marginados, frustados, reprimidos o muertos que siguen poblando el mundo de la plástica actual, real, marginal, casual, divergente, ausente, presente o tangencial...

Por lo menos nos hemos desviado un poco del parque de atracciones de la mayoría de manifestaciones artísticas de hoy. Díganse o muestrense en bienales, museos o fundaciones de toda índole y lugar... Para enseñar fascinación o artificios, nos quedamos -me quedo- con lo primero... Y que dure, se ha sembrado un buen punto de partida y con buen abono.

Limos

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El corazón del limo es el último libro publicado de poemas de Javier Cubero Egea, director de la revista Paralelo Sur y de la web Eldígoras, con su inmenso EOM, donde colaboro con la intermitencias que nos impone el tiempo (corto, terco y verdugo).

Le sigo obra (nos seguimos) desde hace casi treinta años por la amistad, por la recíproca admiración y colaboración en trabajos de creación. Ha sido, y es, una constante, por suerte y satisfacción nuestra y, espero, por muchos siguientes años y siglos. A parte de ello, o quizás por ello, puedo considerar a Javier Cubero el mejor poeta del siglo XXI, de este lado del Atlántico, pero incluso de todos los lados de mares y océanos físicos y etéreos.

Mantiene que es su mejor libro escrito, aunque yo menciono a veces anteriores, especialmente, (continúo trabajando bocetos) a Larvado mar. Pero saborear por partes y en su totalidad a El corazón del limo, como en estas últimas semanas, me ha convencido para acercarme a su pronóstico, esperando que el de la crítica y público también.

Los poemas son espléndios, concisos, aniquilando lo superfluo para adentrarse a una espléndida verdad creativa, acelerada hacia una seguridad de placer y experiencia, dura pero vivida como lo que soñaba ser... Sin adornos innecesarios, sin concesiones, sin más lazos por adquirir, por esperar en cualquier parada del tren interior, acercándose a una razón sincera y creativa, donde sigue hablando casi en exclusiva el corazón y la mente abierta, quizás con sentimientos o heridas por cerrar, esperando el reposo en un limo cercano, del río comocido de la vida misma que serpentea entre los dedos del tiempo ...

Nos quejamos del poco caso, y lo real es parco –muy parco- en edición y exposición de nuestra obra, pero sigue viva una llama o la terquedad en seguir creando a pesar de los mil obstáculos e indiferencias (también y muchas: interferencias), deseando presagiar algún fin próximo en la escalada hacia alguna cumbre cercana o lejana, pero cumbre de libertad y conocimiento, de reconocimiento. Espero y deseo (deseamos).

La calidad permanece y brilla, y se desarrolla en su libro en forma de engarce milagroso con cada una de sus propuestas. Y cada palabra limada por una mente excelsa que fija espejos en cada vena de la razón y de corazones rotos. Intenta recomponer un eterno mosaico de amor, de libertad, y más de setenta espacios para liquidar al aire oscuro de una realidad absurda que debe dejar de molestarnos... Como limo siempre presente, como retención del asco eterno, posible inicio de un pozo para detener amores, poesía o consolación. Existe una gran luz en sus páginas. Precisión y amputación, como esquemas de un viaje por la libre soledad del alma.

Un ejemplo:

LX

Del barro maleable

especular del hombre, horizontal

abierta desnudez entre los juncos,

la palabra,

ya corazón del limo

que en el torno

desprende su sudor,

un respirar fijado

con el fuego.

Topografies

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Trobar-se davant de paisatges com els que ens mostra Manolo Laguillo al Macba és adonar-se que per un paio com jo, nascut a la perifèria, a primers dels 60, el paisatge majoritàriament visible de l’entorn de la gran capital barcelonina, era (és) com un pa de cada dia, semblant a les imatges mostrades per la cambra de Laguillo.

Més d’un cop havia somniat, mentre viatjava en tren fins a Sants o Plaça Catalunya, des de ben jove, que algun dia pararia en alguna d’aquelles estacions properes i alhora distants, com un decorat de pel·lícula en blanc i negre o de colors esmorteïts, i restaria parat durant hores observant aquells paisatges semi-urbans d’estranya vegetació, barrejada amb línies inacabables de totxo i deixalles industrials, envoltat de paranys i habitants solitaris, suggerint invisibilitat o amenaça, sempre ocupats a omplir sacs o cartrons. Estranys tallers, magatzems, fums llunyans i propers, metalls rovellats per arreu i alguna casa aïllada de color mort, només com a testimoni de passada vida...

Es pot anomenar-los: No-llocs, definició retratada/alimentada per intel·lectualitats malaltisses, massa acostumades a la llei del camaleó clonic. Tècnicament seran, però, interpretacions o resultats dins la nova topografia, com a tendència de la fotografia de fa més de trenta anys, on es podria anotar el treball de Laguillo i de tants d’altres, que em mereixen respecta i admiració.

També forma part del meu repertori mental i plàstic per desenvolupar formes quasi abstractes dedicades sempre a la terra, edificis, carrers, polígons, llums mortes, cantonades amb vegetacions esbojarrades, vidres trencats, filferros de tanques sense amos aparents, gats morts, pintades anònimes i pols de runes velles que trepitjo, visualitzo sovint (sovintejava)... I prenc com a referències per estripar continguts de l’ànima, del dia a dia constant i penetrant, absurd, només alterat per la pròpia dinàmica de cada present arcaic, d’un futur que es construeix pervertint més horitzons falsificats. També a la ment que no endevina quasi res, només constata les arrels trencades, adormides o transformades.

Som la carn del paisatge de ciment, ferro, males herbes o turons derrotats que ens anem menjant, on el cel resta perennement gris blavós i amb tocs de groc malaltís...