Sensibilidades

A Blanca:
Me llegaba ayer, entremezclado entre sonrisas, arena y viento de mar, una lectura de párrafos de un gran libro. Editado en Buenos Aires en 1949: Reflexiones sobre la danza y la música, de Alejandro Sakharoff, refleja un amor profundo por la música, danza y el arte, por y para la cultura y la sensibilidad en general...

Transcribo unas letras de saber y emoción, de vida, de su pluma:

"...Cuando el artista se abandona francamente y con todo su ser a su vocación, estáblecese una relación intima entre él y la esencia misma de su arte. Todas sus preguntas reciben una respuesta. Y aún más: le son hechas revelaciones que lo llevan más allá de sus inquietudes personales. Se alza un mundo encantado de la Verdad que le da el saber, la inspiración y el ardor. Un mundo sin límites se ensancha a medida que el artista crece. (...) el arte es justamente el extraño don de franquear el umbral de ese mundo cuyo poseedor puede ver, sentir y vivr las cosas, los estados y las formas más extraordinarios."

Unas, para mí, más que importantes palabras, y sentido.
Presagio de un buen libro, aunque me hicieran escoger, de segunda entrada la página 16, y de primera entrada unas palabras de Leonardo da Vinci:

"Una maravillosa armonía enlaza las cosas entre sí, y el ojo del pintor extrae del espectáculo de la vida los elementos de su arte. El batir de las alas de un pajaro os dará el trazado de un párpado, y la ola que muere en la arena, el movimiento de una sonrisa. En el cielo he hallado reflejos aplicables a la mirada, y las flores me han enseñado actitudes para las manos. Extraigamos las formas de la naturaleza, y las almas de nuestra alma."

Buenos puntos de partida y encuentro, para la reflexión, para la sinceridad en el arte, para la mirada interior...