Universos

El caso del Codex Seraphinianus de Luigi Serafini, editado por el gran Ricci, se contaba ayer su desarrollo en un reportaje de El País Semanal, es más que curioso y más que extraño...

Formaría parte de muchas teorías y sus dibujos herméticos, paradójicos, misteriosos, fabulosos, medievales, malabaristas, inauditos, inverosimiles, alienígenas, o como se quiera llamar a sus dibujos y a un idioma ininteligible, forman un corpus altamente hermético. Para algunos -para él mismo- podrá suponer una espontaneidad o una transmisión extraña de un ego escondido, de un misterio transmisor que llevamos dentro todos o cuando menos los que sintonizan una honda o luz creativa o, por los menos, que se dedican a los misterios del arte. Porqué el arte es misterio. El momento de la creación pura, aunque en muchas ocasiones se define como resultado de un trabajo o estudio previo, de la experiencia, la pureza absoluta del momento de crear es una pulsación fuera de la órbita normal de nuestra ciencia, realidad y razón... Deseo y razón se mal juntan y batallan por salir, para que algo salga, y "sale" casi siempre...
A Serafini sólo le salió una vez, durante un período determinado de su vida, y el grifo se cerró. Si misteriosos son sus dibujos, más lo es la escritura paralela que chorreaba sin parar un lenguaje, aún hoy, imposible de traducir o de entender algo... Todo ello en un Mundo fascinante, inaudito, erudito, único y copia, alegre y triste, claro y oscuro, optimista y pesimista, conciso y amplio, abierto-cerrado, real-irreal, pero siempre maravillosamente IMPRESIONANTE... Casi imposible describir con palabras, pero se puede algo:
El artista, no sólo el plástico, también el compositor, el poeta... bebe de un cajón paralelo. Paralelo y cercano a nuestra realidad, aunque en ocasiones son realidades más lejanas pero con sugerencias algo conocidas, sintonías de otras verdades esbozadas entre hilos de algunas mentes. Aunque se dé títulos -gratuitos, pero cada vez menos- de condes de torres de marfil o simple y llanamente tomados por casi locos, sean genios o falsos profetas, la evidencia de un paso del tiempo cada dia más rápido-apresurado y la amplitud del Conocimiento -con mayúscula- puede resultar una definición más lógica de autenticidad duradera. Y aunque extraña para algunos el resultado es a veces, posiblemente siempre, el desarrollo de haber trabajado-viajado con la Conciencia por entre las líneas y contenidos de mundos cercanos pero casi ausentes que se producen, reproducen y reiteran entre Sueños y en raras, casi imperceptibles pero constantes, Vigilias...
Se traza, cada día, en cada artista, en cada arte que no paramos de fabricar entre los limos del Tiempo, un línea de libertad que corresponde a sucesos simultáneos de un presente, pasado y futuro que se cruzan y traspasan, tanto de arriba-abajo, adelante-atrás como por los lados, en proceso paralelo y multirreal. La razón no se rompe siempre que se "crea" en esta libertad, en estas opciones como frutos por recojer. Son los frutos que se pueden obtener por estar atento, muy atento y ser sincero con lo que el mal llamado azar, crea, siente, mantiene entre las brumas de la mente que, si se quiere, cada vez se nos abre más... Si se quiere, y Luigi quiso.